¿Qué es el aborto?
En sentido lato, aborto es la muerte del producto de la concepción y su
expulsión del organismo materno en cualquier fase de su desarrollo
pre-natal.
"Etimológicamente, aborto significa 'privación de
nacimiento' y proviene del substantivo latino abortus, derivado del verbo
aborior, compuesto, a su vez, por el prefijo ab, que expresa originariamente la
idea de alejamiento y luego las de ausencia o privación, y por el verbo orior,
que significa tanto como levantarse, alzarse, surgir (de allí oriente),
originarse, ser originario (de allí oriundo) y nacer." (1)
Esto puede ocurrir por causas naturales que no dependen de la voluntad humana
o de la interferencia externa. Es el llamado aborto espontáneo, como
consecuencia de alteraciones del organismo materno o accidentes sufridos por la
madre durante el embarazo.
Cuando en estas páginas utilicemos el término “aborto”, siempre nos estaremos
refiriendo al aborto voluntario, provocado, directo, doloso. O sea, a toda y
cualquier intervención, por medios quirúrgicos o farmacológicos, que tenga por
finalidad matar o expeler el producto de la concepción, desde el momento en que
ésta se inicia hasta el nacimiento, es decir, a lo largo de toda la vida
pre-natal.
Si el niño por nacer es matado dentro del útero, estamos
frente a un auténtico asesinato. Cuando el bebé nace vivo y se lo mata después,
se trata también de un homicidio o asesinato llamado infanticidio.
(2) ¿Cuáles son los métodos de
aborto utilizados durante los tres primeros meses de gravidez? Entre
los varios métodos abortivos, que siempre son monstruosos, los más comunes son
los siguientes:
Succión – El cuello del útero es ampliamente dilatado. Un
tubo especial es introducido en él. Una violenta aspiración, 29 veces más
poderosa que la de una aspiradora común, succiona al bebé descoyuntando sus
miembros y transformándolo en un puré sanguinolento que es depositado en un
recipiente. Este método es el más utilizado en las clínicas de aborto.
Dilatación y Raspaje – Un objeto afilado (la cureta), de
forma semejante a una cuchara, corta la placenta y despedaza el cuerpo del bebé,
el cual es succionado a través del cuello del útero, cuya superficie interna es
raspada para extraer los fragmentos que se dejan caer en un recipiente.
No siempre la dilatación y el raspaje son hechas con finalidad abortiva. En
Medicina son también usadas lícitamente para casos de hemorragia en mujeres no
embarazadas después de un aborto espontáneo.
Píldora RU486 – Esta píldora, desarrollada hace 20 años por
la compañía francesa Roussel UCLAF provoca la interrupción casi inmediata del
embarazo. Su uso exige entre tres y quince días de visitas a un establecimiento
médico, así como una combinación de drogas con la posibilidad de complicaciones
que ponen en peligro la vida de la madre. Se la puede ingerir hasta en los
primeros 49 días de gestación para frenar el embarazo. Dos días después, otra
droga combinada induce las contracciones para expulsar el embrión. La misma
compañía productora de la RU486 recomienda tener a mano, durante el uso de la
píldora, un equipo para detectar y tratar con urgencia problemas
cardiovasculares. El mismo presidente del laboratorio, Edouard Saking, declaró:
“De ninguna manera la RU486 es de fácil uso. Una mujer que desea
interrumpir su embarazo debe ‘vivir‘ con su aborto por lo menos una semana
usando esa técnica. Es una terrible experiencia psicológica”.(2)
(3) ¿Cuáles son las técnicas
utilizadas para asesinar un bebé desde el tercero al noveno mes de gestación?
Dilatación y evacuación – Una vez que la víctima es más
grande pues ya tiene de 13 a 24 semanas, el cuello del útero es ampliamente
dilatado. Como los huesos de la criatura ya están calcificados, se hace
necesario utilizar tenazas especiales para descoyuntarlos. Primero se destroncan
los brazos y las piernas del niño y después se destroza su columna vertebral.
Por último, antes de ser succionado, el cráneo del niño es aplastado. Algunas
partes del cuerpo del feto son removidas con fórceps (instrumento utilizado para
auxiliar el parto normal y en ciertos casos especiales). El trabajo de la
enfermera consiste en rearmar las distintas partes extirpadas para asegurarse de
que todo el cuerpo ha sido extraído.
Inyección de solución salina fuertemente hipertónica – Una
aguja de ocho centímetros perfora la pared abdominal de la mujer y el saco
amniótico, del cual se extraen 60 ml. de líquido amniótico. A continuación se
inyectan 200 ml. de solución salina fuertemente hipertónica. Acostumbrado a
alimentarse del líquido amniótico en el cual está sumergido, el bebé ingiere la
solución salina, la cual va quemando su piel, su garganta y sus órganos
internos. Intenta en vano luchar por la vida, se agita desesperadamente de un
lado al otro dentro del útero, en terribles contorsiones. Su agonía puede durar
horas, siendo entonces expelido del claustro materno. Se ve entonces una
criatura toda cauterizada, con el cuerpo enrojecido por las quemaduras
producidas.
Aborto por prostaglandinas – Las prostaglandinas son
substancias que provocan las contracciones propias del parto. Ellas son
inyectadas en el líquido amniótico o suministradas bajo la forma de supositorios
vaginales. Como consecuencia de las contracciones uterinas, la madre expele la
criatura ya muerta o insuficientemente desarrollada para sobrevivir fuera del
útero materno. En este caso el bebé, dejado sin cuidado alguno, muere.
Histerotomía – (del griego hysteris: vientre;
tomein: cortar). Como en una operación cesárea, el abdomen y el útero
son abiertos quirúrgicamente. Con la diferencia que en la histerotomía, al
contrario de la cesárea común, la intención no es salvar al niño, sino
eliminarlo. Algunos médicos usan la misma placenta para asfixiar al bebé.
Recientemente fue publicada una noticia dando cuenta de que el Gobierno
británico considera la posibilidad de exigir el uso de analgésicos por parte de
los médicos cuando éstos practican abortos de fetos con 18 o 20 semanas de
gestación. La medida se destina a corregir una anomalía legal que protege a los
animales no nacidos de la experimentación científica, pero permite el aborto y
otras operaciones en fetos humanos sin el uso de
analgésicos
|
Consecuencias físicas y psicológicas en general
El aborto, legal o ilegal también daña física y psicológicamente a la mujer y
hasta puede acarrearle la muerte. La propaganda proabortista continuamente
proclama la mentira de que el aborto legal es médicamente "seguro", y de que es
necesario legalizarlo o despenalizarlo debido a la gran cantidad de muertes
maternas causadas por el aborto ilegal. Esta estrategia para legalizar el aborto
se llama engañosamente "Maternidad sin riesgos". Entre las complicaciones
físicas del aborto en la mujer están las infecciones, las hemorragias, las
complicaciones debido a la anestesia, las embolias pulmonares o del líquido
amniótico, así como las perforaciones, laceraciones o desgarros del útero.
Estadísticamente hablando, se estima que el riesgo inmediato de dichas
complicaciones es de un 10%, pero el de las complicaciones a largo plazo es
entre el 20 y el 50%.
Además de las complicaciones físicas, las mujeres sufren emocional y
espiritualmente de lo que ya se ha identificado como el "Síndrome
post-aborto." Estos efectos del aborto incluyen sentimientos de culpa,
angustia, ansiedad, depresión, baja autoestima, insomio, diversos tipos de
neurosis y de enfermedades psicopáticas, tendencia al suicidio, pesadillas en
las que aparecen los restos del bebé abortado, recuerdos dolorosos en la fecha
en que hubiera nacido, etc.
La Real Academia de Obstetricia de Inglaterra ha informado que las
probabilidades de problemas pisquiátricos graves y permanentes después de un
aborto pueden alcanzar hasta el 59% de las madres. La Organización Mundial de la
Salud por su parte informa que las mujeres que se practican abortos por razones
psiquiátricas son precisamente las que corren mayor riesgo de problemas mentales
una vez realizado el aborto. Otros estudios muestran que las mujeres que se han
practicado un aborto por razones de violación, incesto, salud, etc., tienen aún
más probabilidades de sufrir problemas emocionales y psiquiátricos severos que
las que se lo han practicado por razones socioeconómicas.
FUENTES: Dr. Rafael Cabrera, "Trauma post-aborto y sanación," X
Congreso Mundial por el Amor, la Vida y la Familia de Human Life International,
San José, California, abril de 1991; David C. Reardon, Aborted Women, Silent No
More (Westchester, Illinois, U.S.A.: Crossway Books, 1987), xxiv,
xxv.
Los efectos del aborto.
En la mayoría de los casos a la mujer nunca le dijeron todo lo que le podía
pasar. Muchas veces, se explica el aborto como un procedimiento quirúrgico
clínicamente seguro. Pero los aspectos del llamado procedimiento "seguro" pueden
dejar un deterioro físico permanente, sin mencionar el potencial de problemas
psicológicos crónicos.
WEBA, (Women Exploited by Abortion/Mujeres
explotadas por el aborto), es la voz de la experiencia. Las mujeres
pertenecientes a WEBA conocen la realidad porque la han experimentado. Su
objetivo es educar a todas las mujeres sobre los efectos del aborto, para que
busquen una alternativa.
"El médico me dijo que sólo había que inyectar
un poco de líquido, que sentiría unos y que después expulsaría el feto. No fue
así. Sentí a mi niña moverse de aquí para allá durante hora y media, el tiempo
en que tardó en fallecer. Tuve un parto difícil durante más de 12 horas y yo
misma di a luz a mi hija. Era hermosa, tenía cinco meses y medio... pero estaba
muerta".
Las siguientes páginas enumeran los potenciales efectos físicos y
psicológicos del aborto. WEBA desea que todas las mujeres los conozcan:
Consecuencias físicas:
· Esterilidad. · Abortos espontáneos. · Embarazos ectópicos. ·
Nacimientos de niños muertos. · Trastornos menstruales. · Hemorragia.
· Infecciones. · Shock. · Coma. · Utero perforado. ·
Peritonitis. · Coágulos de sangre pasajeros. · Fiebre /Sudores fríos.
· Intenso dolor. · Perdida de otros órganos. · Muerte
"Mi
médico no me contó que podría tener una abundante hemorragia y una infección que
me podría durar semanas, como así fue. Tampoco me dijo nada sobre la posibilidad
de que me extirpasen el útero (histerectomía), tal como me hicieron ocho meses
más tarde", dijo una de las víctimas del aborto.
Transtornos emocionales:
· Llanto/ Suspiros. · Insomnio. · Perdida de apetito. · Perdida
de peso. · Agotamiento. · Tragar constantemente. · Nerviosismo.
· Disminución de la capacidad de trabajo. · Vómitos. · Trastornos
gastrointestinales. · Frigidez.
Efectos psicológicos:
· Culpabilidad. · Impulsos suicidas. · Sensación de perdida. ·
Insatisfacción. · Sentimiento de luto. · Pesar y remordimiento. ·
Retraimiento. · Perdida de confianza en la capacidad de toma de decisiones.
· Inferior autoestima. · Preocupación por la muerte. · Hostilidad.
· Conducta autodestructiva. · Ira/ Rabia. · Desesperación. ·
Desvalimiento. · Deseo de recordar la fecha de la muerte. · Preocupación
con la fecha en que "debería" nacer o el mes del nacimiento.
"Nadie me
dijo nunca que viviría con esta decisión durante el resto de mi vida...Han
pasado varios años pero mi pena continua."
· Intenso interés en los bebés. · Instintos maternales frustrados. ·
Odio a todos los relacionados con el aborto. · Deseo de acabar la relación
con su pareja. · Pérdida de interés en el sexo. · Incapacidad de
perdonarse a si misma. · Sentimiento de deshumanización. · Pesadillas.
· Ataques / Temblores. · Frustración. · Sentimientos de ser
explotada. · Abuso de los niños.
¡He aquí los hechos!
Cada año, más de un millón y medio de
mujeres se practican abortos. Eso significa que más de 4.000 niños aún no
nacidos son matados legalmente cada día. Para muchos, el aborto parece ser la
decisión correcta en el momento. Pero a estas mujeres casi nunca se les cuentan
los posibles efectos físicos y psicológicos que pueden arrastrar como secuela
para el resto de sus vidas.
WEBA, Women Exploited by Abortion -Mujeres
Explotadas por el Aborto-, es una organización nacional no lucrativa de mujeres
que han tenido abortos. Las miembros de WEBA ahora se dan cuenta de lo
equivocadas que fueron sus decisiones. WEBA se esfuerza por conseguir educar a
las mujeres sobre el aborto y sus efectos nocivos y permanentes. |
|
|
|
|